Dan a Tepoztlán premio global
Madrid, Esp. La “exitosa consolidación de la oferta turística” del Pueblo Mágico de Tepoztlán ocasionó que Morelos recibiera este miércoles el premio al mejor Producto de Turismo Activo Internacional por parte de la Feria Internacional de Turismo (Fitur).
“Es un honor recibir el reconocimiento que se hace al trabajo en la entidad. En la parte final competimos con estrategias de Tailandia y China, entre otras. Nuestra oferta de magia y cultura está integrada por 18 productos turísticos”, explicó en entrevista la titular de Turismo en Morelos, Mónica Reyes.
Por cuestiones de protocolo, el reconocimiento fue entregado por los organizadores de la Fitur al secretario de Turismo federal, Enrique de la Madrid, minutos después de la apertura oficial del pabellón de México en la feria.
Después del anuncio, el gobernador de Morelos, Graco Ramírez, escribió en su cuenta de Twitter: “Mi reconocimiento a @MonikaRFuchs por su compromiso y a todos los operadores de hoteles, spas y gastronomía. A toda la gente de Tepoztlan”.
A decir de Mónica Reyes, una de las prioridades en la entidad es consolidar los atractivos turísticos, conjuntando gastronomía, cultura, historia, naturaleza y ofrecerlos en un solo producto.
“Diversificar no es tarea fácil, pero lo estamos logrando de una manera decidida con el apoyo federal, que está en la misma línea de trabajo. Por lo anterior, ganar el premio representa un gran reto y compromiso para llegar cada vez más lugares”, agregó.
El Pueblo Mágico de Tepoztlán, además de contar con gran afluencia de viajeros nacionales, se encuentra entre las preferencias de los estadunidenses y europeos, que han encontrado ahí grandes experiencias, las cuales transmiten de boca en boca.
“Morelos y México tienen ahora más razones para ser visitados. Los morelenses debemos sentirnos orgullosos de lo que somos y mostrárselo al mundo como lo estamos haciendo hoy. Las estrategias de Visión Morelos no cesarán, porque hay resultados tan tangibles como este premio”, afirmó la funcionaria. (Fuente: El Economista)
