Por Armando de la Garza
En el vasto universo de las relaciones públicas y el turismo, pocos nombres resuenan con tanta fuerza y respeto como el de Alejandro Rubín Carballo. Difícilmente alguien de habla hispana no ha oído hablar de su influencia y logros en el sector. Su historia, rica y extensa, refleja un compromiso inquebrantable con el desarrollo y la cooperación internacional, consolidándolo como una figura clave en el ámbito de las relaciones comerciales globales.
Desde sus inicios, Rubín Carballo ha demostrado una capacidad excepcional para conectar personas y organizaciones, su carrera despegó en la Asociación Gallega de Ferias y Eventos de la cual fue Presidente, igualmente fungio como Vicepresidente de la Asociación de Ferias de España (AFE) e impulsor de la Unión Iberoamericana de Ferias(UNIFIB) en Telefónica de España, ocupó un cargo directivo que le permitió adquirir una profunda comprensión de las dinámicas empresariales a nivel internacional. En esta época, fue parte fundamental de la estrategia de expansión de la compañía, ayudando a establecer una sólida presencia en mercados emergentes y consolidar su reputación como líder en telecomunicaciones.
Tras su paso por Telefónica, Rubín Carballo se unió a Expourense, donde su visión estratégica y habilidades de liderazgo fueron determinantes para el crecimiento de esta entidad. En Expourense, no solo se enfocó en la organización de ferias y eventos, sino que también trabajó incansablemente en la promoción de la cultura y el comercio gallego en el extranjero. Su enfoque innovador y su capacidad para atraer a diferentes públicos contribuyeron a que la entidad se posicionara como un referente en la organización de eventos a nivel nacional e internacional.
Además de su carrera empresarial, Alejandro ha sido un ferviente defensor del turismo y la cultura, entendiendo la importancia de estos sectores en la economía global. Como Presidente de la Asociación Gallega de Ferias/Eventos, ha promovido la relevancia de los encuentros comerciales no solo como oportunidades de negocio, sino también como plataformas para el intercambio cultural y la creación de redes de colaboración. Su liderazgo ha sido crucial para fomentar un ambiente propicio para la inversión y el desarrollo en Galicia, convirtiendo a la región en un punto neurálgico para eventos internacionales.
Pero su influencia no se limita a España. Como Canciller de la Orden del Camino de Santiago, Rubín Carballo ha trabajado arduamente para promover este emblemático recorrido, que atrae a miles de peregrinos de todo el mundo cada año. Este papel no solo implica la preservación de la tradición, sino también la modernización de las infraestructuras y servicios que acompañan a los viajeros, asegurando que la experiencia del Camino sea enriquecedora y accesible para todos.
Recientemente, Rubín Carballo ha dado un paso más en su incansable trayectoria al fundar ASICOTUR, la Asociación Internacional para la Cooperación y Desarrollo Turístico. Con presencia en 37 países, ASICOTUR nace de la necesidad de fomentar la colaboración entre naciones para impulsar el crecimiento de la industria turística a nivel global. A través de esta asociación, Rubín Carballo busca crear un espacio donde expertos, emprendedores y líderes del sector puedan compartir conocimientos, experiencias y mejores prácticas, promoviendo así un turismo sostenible y responsable.
La visión de Rubín Carballo se basa en la creencia de que el turismo puede ser un motor de desarrollo económico y social. Ha abogado por un enfoque que priorice la sostenibilidad y la inclusión, garantizando que las comunidades locales se beneficien del crecimiento turístico. Bajo su liderazgo, ASICOTUR se ha convertido en un referente en la promoción de iniciativas que buscan equilibrar el desarrollo económico con la preservación del patrimonio cultural y natural.
Hoy en día, Alejandro Rubín Carballo es considerado una referencia mundial en materia turística. Su capacidad para forjar alianzas y generar sinergias ha dejado una huella indeleble en el sector, convirtiéndolo en un líder visionario cuya influencia se extiende más allá de las fronteras. Con su legado, Rubín Carballo continúa inspirando a nuevas generaciones de profesionales en el ámbito de las relaciones públicas y el turismo, consolidándose como un verdadero rey en su campo.
Su historia es un testimonio del poder de la colaboración y la innovación en un mundo cada vez más interconectado. Alejandro Rubín Carballo no solo ha transformado su entorno, sino que ha abierto caminos para que otros sigan su ejemplo, demostrando que con determinación y visión, es posible hacer una diferencia significativa en el ámbito global. Sin duda, su legado perdurará y seguirá guiando a las futuras generaciones en el fascinante mundo de las relaciones públicas y el turismo.
