#MexicoExtraordinario
Cancún, Quintana Roo – Francisco y su esposa, una pareja argentina, vivieron una pesadilla al intentar vacacionar en el Caribe Mexicano. A pesar de contar con boletos de regreso y reservaciones de hotel, las autoridades del Instituto Nacional de Migración (INAMI) les negaron la entrada al país.
Tras aterrizar, notaron que los pasajeros eran sometidos a rigurosos interrogatorios. Una oficial les pidió hacer una nueva reserva de hotel, pero enfrentaron problemas de conexión Wi-Fi. En lugar de disfrutar de su viaje, fueron encerrados durante 15 horas en una sala de migración, donde presenciaron el sufrimiento de otros detenidos.
A pesar de demostrar que tenían 2,000 USD para gastar y de que la esposa está embarazada, no recibieron empatía de los oficiales. Finalmente, les informaron que no podían ingresar a México, lo que resultó en la pérdida de su inversión en vacaciones.
Desilusionados, decidieron volar a Lima, donde se les ofreció refugio. Este incidente ha generado indignación en redes sociales y se suma a denuncias previas sobre el trato de migración en Cancún. Francisco concluyó su relato con la esperanza de que otros no enfrenten una situación similar.
