México Extraordinario/Armando de la Garza
La tranquilidad que caracteriza a la temporada baja en Cancún está resultando más severa de lo habitual para el sector turístico. Restauranteros y empresas náuticas están enfrentando una situación difícil, marcada por bajas ventas que han llevado a cierres parciales y a la implementación de “descansos solidarios” para sus empleados.

La falta de afluencia de turistas, especialmente en comparación con los meses de mayor demanda, ha impactado directamente en la economía local. Muchos establecimientos, desde pequeños restaurantes hasta grandes operadores de actividades acuáticas, han tenido que ajustar sus operaciones para mitigar las pérdidas.
En algunos casos, esto ha significado reducir horarios de servicio, cerrar temporalmente en días específicos de la semana o, en un esfuerzo por evitar despidos, dar a sus trabajadores días libres sin goce de sueldo, una práctica conocida como descanso solidario.
El sector de servicios de Cancún, que depende en gran medida del flujo de visitantes, espera que la situación mejore con la llegada de las próximas temporadas vacacionales. Mientras tanto, los empresarios locales buscan estrategias para sortear este periodo de incertidumbre, con la esperanza de que la recuperación no tarde en llegar.