Armando de la Garza
Madrid, 1 de julio de 2025 — A partir de este martes, 1 de julio, España ha puesto en marcha una nueva regulación que obliga a inscribir todos los alquileres de corta duración en el país en el Registro Único de Alquileres de Corta Duración. Esta medida, impulsada por la Unión Europea, busca ordenar y controlar un mercado en constante crecimiento, especialmente impulsado por plataformas digitales y la creciente demanda de turismo de temporada.
El objetivo principal de esta iniciativa es garantizar mayor transparencia, seguridad jurídica y una mejor gestión del turismo en las ciudades y regiones más visitadas. Además, busca reducir los efectos negativos del alquiler turístico descontrolado, como la escasez de viviendas para residentes y el aumento de los precios inmobiliarios.
Desde los organismos responsables, se informó que los propietarios y plataformas deberán registrar sus propiedades antes de ofrecer alquileres de corta duración. La medida también contempla sanciones para quienes incumplan con esta obligación, que pueden incluir multas económicas y la suspensión de actividades.
El sector turístico ha recibido con opiniones divididas esta normativa. Por un lado, algunos expertos señalan que contribuirá a mejorar la calidad del mercado y a proteger los derechos de los residentes. Por otro, algunos propietarios y anfitriones temen que las nuevas regulaciones puedan limitar su capacidad de negocio y afectar la oferta de alojamiento en destinos clave.
Con esta medida, España se suma a otros países europeos que buscan equilibrar el crecimiento del turismo con la sostenibilidad urbana y la protección de las comunidades locales, en un contexto donde la demanda de alquileres temporales continúa en alza.