CIUDAD DE MÉXICO.- PróMéxico enfrenta una de sus peores crisis desde su fundación. Para este año, espera un recorte de 36% a su presupuesto y el despido de 160 trabajadores, debido a malos manejos, gastos excesivos y nepotismo por parte de su titular, Francisco González.
Investigaciones
Entre las investigaciones que tiene ProMéxico, la dependencia creada por el gobierno federal para atraer inversión extranjera, está una por parte de la Auditoría Superior de la Federación (ASF), debido al gasto excesivo por el Pabellón de México en la Expo Milán, pues se tenía un presupuesto de 250 millones de pesos y se terminó gastando 450 millones, a pesar de que no se hizo ni 60% de lo planeado originalmente.
Como se recordará, el pasado sábado 6 de febrero, Excélsior publicó que González gastó excesivamente en su viaje de gira por Francia para acompañar al presidente de México, Enrique Peña Nieto, al destinar solamente 211,000 pesos en su boleto de avión.
Según la página de Transparencia de ProMéxico, si se suman todos los gastos realizados durante julio del año pasado, cuando fue a París, entre su comitiva de seis colaboradores, entre ellos su asistente personal, Daniel Tamayo, el viaje costó más de 740,000 pesos.
Otro de los temas por lo que se encuentra bajo investigación es que desde hace 30 meses que llegó a la dirección de ProMéxico, ha creado una estructura burocrática comparable a la Oficialia Mayor de una secretaría de Estado, pues uno de cada tres empleados de esa área tiene un sueldo de mando superior.
Inacción
Aseguran los empleados de ProMéxico que entre los 160 despidos que se realizarán en los próximos días, no hay ningún allegado al director, ni se nota algún esfuerzo por adelgazar la estructura burocrática que podría conllevar en unos meses a la desaparición de esta dependencia, la cual, aseguran los líderes de las cámaras empresariales, no ha servido de nada en 30 meses, por lo que están por quitar sus aportaciones al fideicomiso que hace funcionar a ProMéxico.