Armando de la Garza
Zacatecas, Zac., 19 de mayo de 2025.- Cuando pensamos en Zacatecas, lo primero que viene a la mente son su imponente catedral, sus callejones coloniales y su legado minero. Sin embargo, esta tierra oculta secretos que van mucho más allá de su historia colonial y su arquitectura. Desde paisajes naturales únicos hasta vestigios arqueológicos enigmáticos, Zacatecas sorprende con lugares que desafían las expectativas y ofrecen experiencias inolvidables.
Aquí te presentamos siete sitios que revelan la riqueza y diversidad de este fascinante estado:

Museo de Guadalupe de Arte Virreinal: un tesoro barroco en un convento franciscano
A pocos minutos del centro de Zacatecas, en Guadalupe, se encuentra este majestuoso excolegio del siglo XVIII. Instalado en un convento franciscano, el museo alberga una de las colecciones de arte virreinal más destacadas de México, con obras de Miguel Cabrera y Cristóbal de Villalpando. Su biblioteca, la escalera regia y su pinacoteca hacen de este espacio una joya del barroco novohispano.

Campo Real Vinícola: vinos premiados en medio del desierto
En Trancoso, cerca de la capital, esta vinícola ha logrado cultivar uvas de alta calidad en el semidesierto zacatecano. Destaca por su arquitectura, su restaurante y su vino insignia “Tierra Adentro”. Los visitantes pueden recorrer los viñedos en bicicleta o en transporte turístico, visitar la cava y disfrutar de catas y eventos en su restaurante, desafiando las leyes de la naturaleza.

La Quemada: el enigma arqueológico que dominó el norte mesoamericano
A unos 50 kilómetros de Zacatecas, en el Valle de Malpaso, se alza esta antigua ciudad prehispánica. Con terrazas, murallas y estructuras monumentales en piedra, La Quemada aún guarda misterios sobre quién la habitó y su función en las redes comerciales y ceremoniales del norte de México. Caminar entre sus ruinas es adentrarse en un pasado lleno de enigmas, rodeado por un paisaje semidesértico imponente y silencioso.
Sierra de Cardos: aventura entre montañas y rocas monumentales
Cerca del Pueblo Mágico de Jerez, esta sierra ofrece un escenario natural lleno de formaciones rocosas y bosques de pino. Ideal para senderismo, rappel, kayak, ciclismo de montaña o tirolesas, la Sierra de Cardos también invita a relajarse con un picnic o a pasar la noche en cabañas entre las montañas, siendo un destino perfecto para los amantes de la naturaleza y la aventura.

Museo Rafael Coronel: magia y arte en las ruinas del exconvento de San Francisco
Este museo, que alberga la colección de máscaras mexicanas más grande del mundo —más de 10 mil piezas—, revela el misticismo y la cultura popular de México. Sus muros de cantera y pasillos abovedados también resguardan títeres, cerámicas y bocetos de Diego Rivera, convirtiéndose en un espacio que emociona y maravilla a quienes lo visitan.

La Ticuata: pesca, trajineras y atardeceres en el corazón de Teúl de González Ortega
En este tranquilo pueblo, la Presa La Ticuata ofrece un refugio natural donde disfrutar de paseos en trajinera, remar en kayak, pescar lobina o simplemente contemplar el atardecer. Un rincón ideal para quienes buscan paz, conexión con la naturaleza y momentos de descanso en un entorno sereno.
Sierra de Órganos: un escenario natural que parece de otro mundo
En Sombrerete, el Parque Nacional Sierra de Órganos cautiva con sus formaciones rocosas que parecen tubos gigantes de órgano, escenario que ha sido utilizado en varias películas nacionales e internacionales. Perfecto para senderismo, fotografía o simplemente admirar la belleza de la naturaleza, este paisaje desafía las leyes de la realidad y transporta a quienes lo visitan a un mundo fantástico.
Zacatecas, más allá de su historia colonial, es un estado donde el pasado y el presente conviven en paisajes que parecen de otro mundo. ¿Cuál de estos sitios será el primero que visitarás?